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Partes de un vuelo – Cómo es volar en un avión
Stefanie Waldek es una periodista independiente especializada en espacio, viajes y diseño, con experiencia en aviación, meteorología y regiones polares. Ha sido editora de Architectural Digest, TripAdvisor y ArtNews.
Todos hemos oído la frase “es más probable que mueras en un accidente de coche que en un accidente de avión”, pero eso no sirve de consuelo para quienes, comprensiblemente, se sienten un poco perturbados por la idea de volar a cientos de kilómetros por hora en un trozo de metal a unos 11 kilómetros por encima de la superficie de la Tierra. (Sin embargo, es cierto: el Consejo Nacional de Seguridad sitúa las probabilidades de morir en un accidente de tráfico en una de cada 107, basándose en las muertes registradas, mientras que no hay datos suficientes para calcular siquiera las probabilidades de morir en un accidente aéreo).
“Cuando las personas acuden para tratar su miedo a volar, suelen decir que saben que volar es una forma segura de viajar y esto puede tener sentido para ellos de forma racional y lógica”, dice la Dra. Rebecca Hoffenberg, psicóloga clínica. “El problema es que su cuerpo ha formado un patrón de respuesta en el que los aviones se han asociado con la ansiedad”.
¡Los peores miedos al despegue explicados!
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Para algunos vacacionistas, los viajes en avión pueden ser una fuente importante de ansiedad antes del viaje. Y aunque los aviones son ampliamente promocionados como la forma más segura de viajar, puede ser difícil centrarse en los aspectos positivos cuando se experimentan niveles elevados de estrés. Según estimaciones de ABC Health & Wellbeing, cerca del 40% de las personas de todo el mundo tienen al menos cierto miedo a volar, y sólo un segmento menor de la población tiene una fobia intensa.
Sea cual sea su opinión sobre los viajes en avión, puede ser útil aprender algunas de las técnicas más comunes que utilizan los viajeros nerviosos para calmar sus nervios antes y durante un vuelo largo. Esta información puede ayudarle a controlar su propia ansiedad en un viaje especialmente turbulento o a apoyar a sus familiares y amigos que no estén tan entusiasmados como usted por volar. Por supuesto, cada viajero tiene su propia tolerancia a la ansiedad en los vuelos, por lo que si se encuentra en pleno modo de pánico puede ser una buena idea hablar con un profesional de la salud mental antes de partir.
LA PRIMERA VEZ QUE SE MONTA EN UN AVIÓN (Cómo se siente realmente)
A medida que se desplaza por la pista de aterrizaje puede sentir pequeños golpes, esto es debido a la superficie de la pista y a las luces de la línea central de la pista. También puede oír o sentir una leve vibración de las ruedas del avión cuando éstas giran hasta alcanzar la velocidad.
El rodaje de despegue por la pista dura normalmente unos 20 segundos. Los ligeros paneles interiores y el salpicadero pueden traquetear y vibrar un poco al principio. Al cabo de unos instantes, el morro del avión se inclinará hacia arriba y todo se volverá más silencioso y suave al despegar.
A veces puede parecer que el avión sube demasiado. La gente me ha preguntado si el avión podría deslizarse hacia abajo o inclinarse hacia atrás cuando el avión sube con tanta pendiente. La respuesta es no, eso no ocurre, nunca ha ocurrido y nunca ocurrirá. El ángulo pronunciado es normal porque nos permite subir rápidamente a altitudes más suaves y más eficientes en cuanto a combustible. No te preocupes por los ángulos pronunciados, eso sólo significa que tu avión tiene un gran exceso de potencia.
Durante el despegue, es posible que oiga un ruido seco cuando el morro del avión se inclina hacia arriba y usted despega. Eso es el amortiguador del tren de aterrizaje extendiéndose hasta su límite. El avión está diseñado para permitir un despegue pronunciado. Te puede preocupar que la cola se arrastre en la pista. Eso es muy raro, además hay algo llamado “tailskid” que la protege.
Por qué volar te hace sentir mal
Para quienes tienen miedo a volar, las turbulencias durante el vuelo pueden ser el factor que convierta el nerviosismo en pánico. Entender qué son las turbulencias -y por qué no son tan malas- suele ser el primer paso para calmarse mientras se está en el aire.
Volar puede ser intrínsecamente aterrador. Al fin y al cabo, los seres humanos evolucionaron con dos piernas para estar de pie en lugar de con alas para volar. Esta completa falta de disposición biológica hacia el vuelo hace comprensible la incomodidad en el aire. Esos pequeños movimientos en el aire y las diversas formas de turbulencia que no harían parpadear a un pájaro son sensaciones completamente extrañas para el cuerpo humano. Afortunadamente, los humanos también evolucionaron con cerebros avanzados, y esa capacidad de comprensión es exactamente lo que se necesita para superar la ansiedad de vuelo inducida por las turbulencias. Por ello, esta guía 101 sobre las turbulencias le ayudará a tranquilizarse. ¿Qué son las turbulencias? La turbulencia es un invitado no deseado en nuestras emociones, nuestras relaciones y nuestras vidas. Es una palabra dura con las implicaciones correspondientes, y cuando se utiliza para describir los viajes aéreos, es francamente aterradora para aquellos propensos a la ansiedad de vuelo.
