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Salidas de vuelos a Kabul
Últimas noticias del aeropuerto de Kabul: Con los talibanes estableciendo su dominio sobre Afganistán tras completar la toma de la capital, Kabul, están llegando imágenes impactantes del país que muestran a personas desesperadas por huir del país.
El increíble vídeo muestra el despegue de un avión del aeropuerto de Kabul y la caída de al menos tres personas de un avión militar estadounidense. Según los informes, los habitantes de las cercanías del aeropuerto de Kabul afirmaron haber visto a tres hombres sujetarse a las ruedas de la aeronave y posteriormente caer al vacío.
Anteriormente, al menos 5 personas murieron y varias más resultaron heridas en un tiroteo en el aeropuerto internacional Hamid Karzai de Kabul. El incidente tuvo lugar cuando cientos de personas intentaron entrar por la fuerza en los aviones que salían de la capital afgana, temiendo una embestida de los talibanes.
Afgano cayendo de un avión
Al parecer, el caos y el pánico se extendieron por la capital afgana durante el fin de semana y el lunes, cuando Estados Unidos evacuó al personal de su embajada y los talibanes arrasaron la zona mientras el ejército estadounidense completaba su retirada prevista.
Se vio a los afganos agolparse en el aeropuerto de Kabul, escalando muros de hormigón y corriendo por la pista mientras intentaban embarcar en vuelos internacionales a la sombra de la creciente insurgencia que controlaba el país antes del 11-S.
Las fotos de Kabul, así como los relatos de los testigos y los reportajes de Associated Press, Reuters y otros medios documentaron la rápida evolución de la situación, en la que se confirmaban nuevos detalles aparentemente a cada minuto.
El Departamento de Defensa dijo que su prioridad, mientras el ejército se preparaba para salir de Afganistán, era trabajar para evacuar al personal diplomático, así como a los 30.000 solicitantes de visados especiales para inmigrantes afganos, aunque los esfuerzos de evacuación se vieron obstaculizados por la situación sobre el terreno, ya que el presidente Joe Biden ordenó temporalmente un aumento de las fuerzas en Kabul.
Avión de Afganistán
La Fuerza Aérea dijo que la tripulación de un C-17 decidió “abandonar el aeródromo lo antes posible” ese día debido al deterioro de la situación de seguridad. Funcionarios estadounidenses encontraron más tarde restos humanos aplastados dentro del hueco de la rueda. La Fuerza Aérea ha prometido una investigación exhaustiva para “evitar que una situación como ésta se repita”. En Kabul, los residentes se enfrentan a sus propias preguntas.Wali Salek, que lleva 20 años viviendo en el barrio de la Familia Panjsad de Kabul, se pregunta cómo pudo caer la desgracia desde el cielo, haciendo que dos cuerpos, entre ellos el de Fada, se estrellaran contra su tejado agrietado como si fuera “una explosión” que estallara.En las afueras de la ciudad, el padre de Fada se pregunta por qué su hijo mayor fue al aeropuerto esa mañana sin decírselo. Se pregunta por qué el piloto careció de “humanidad” y decidió despegar mientras la gente se aferraba: “Si alguien se aferra al avión, ¿tiene el piloto derecho a volar? ¿Es esto lícito?” dijo Payanda el martes. “Fue como matar a un mosquito que ni siquiera se considera humano”. Fada nació en 1996 o 1997 – Payanda Mohammad no recuerda exactamente cuándo – cuando los talibanes tomaron Kabul por primera vez.El mayor de 10 hijos, el niño creció rodeado de naturaleza en la ciudad de Paghman, al oeste de Kabul. La casa de la familia, de cuatro habitaciones, tenía un patio lleno de cerezos de color rojo oscuro.
El caos de Kabul
Las caóticas y trágicas escenas en el aeropuerto tras la caída de Kabul en manos de los talibanes probablemente se conviertan en un símbolo definitorio del fracaso de Occidente en Afganistán. Siguen a la evacuación en helicóptero, el domingo, de la embajada de Estados Unidos y otras misiones diplomáticas, en imágenes que recuerdan a la caída de Saigón en 1975.
Los disparos en el aeropuerto habían obligado a algunos pasajeros a refugiarse mientras esperaban los vuelos para salir del país. Massouma Tajik, un analista de datos de 22 años, se encontraba entre los cientos de afganos que esperaban ansiosos para embarcar en un vuelo de evacuación. “Veo a la gente llorando, no están seguros de si su vuelo se producirá o no. Yo tampoco”, dijo por teléfono, con pánico en su voz.
